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El emplazamiento de mi bonsái

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   El emplazamiento de mi bonsái

Rompamos algunos esquemas: los bonsáis de interior no existen. Hablando con propiedad lo que si existe son condiciones de interior que permiten el cultivo de algunos tipos de plantas, incluidos los bonsáis. Existen algunas especies de bonsáis procedentes de regiones tropicales y subtropicales que se ofrecen en nuestras latitudes como bonsáis de interior, esto es debido a las condiciones climáticas y lumínicas de su lugar de origen que son: la inexistencia de variaciones notables de temperatura, la humedad y la escasez de luz. Los bonsáis de exterior en cambio han de estar adaptados al clima local y a los cambios de temperatura y humedad tanto estacionales, como diarios.

Emplazamiento interior

La adaptación de un bonsái a un emplazamiento interior dependerá principalmente de 3 factores: luz, temperatura y humedad. Los principales géneros que mejor podremos adaptar serán ficus, carmona, zelkova y sageretia.

Luz

La luz es el factor más importante para el desarrollo de un bonsái en interior. El lugar ideal para ponerlo será siempre cerca de una ventana amplia y clara, como mucho a un metro y medio con cierto margen dependiendo de la especie.

Temperatura

Los arboles tropicales requieren unas temperaturas mínimas en invierno de entre 10 y 16 grados centígrados. El resto del año se adaptan bastante bien a las altas temperaturas con la humedad adecuada. Los bonsáis de interior no soportan las corrientes de aire y los colocaremos lejos de radiadores de calor y televisores o equipos de aire acondicionado.

Humedad

Para evitar deshidrataciones los bonsáis de interior precisan humedad ambiental, que como mínimo será del 50%. Además, hay que tener en cuenta que temperaturas elevadas requieren de humedades también altas altas para que el bonsái pueda crecer adecuadamente. En ambientes secos puede aumentarse la humedad ambiental alrededor del bonsái pulverizandola copa o también elevándolo sobre bandejas planas llenas de agua y arena, cuidando por supuesto que los orificios de drenaje de la maceta no contacten con el agua de la bandeja. La evaporación del agua refrescará el ambiente.

 



Emplazamiento exterior

Los bonsáis de exterior tienen las mismas exigencias que los árboles en su estado natural (con las limitaciones que supone el recipiente: riego, abonado...), prefiriendo generalmente exposiciones soleadas, a excepción de algunos caducifolios en los veranos más rigurosos que prefieren ambientes sombreados y resguardados del viento para evitar las quemaduras en las hojas. Dentro de este grupo de especies sensibles están los siguientes: acer, fagus, carpinus y betula; mientras que olivos, higueras y manzanos son más resistentes.

Para el manejo general de los bonsáis se recomienda la lectura del artículo: “Iniciación al universo bonsái”, con las nociones básicas de riego y abonado, entre otros.

 

…son de interior, pero no de plástico

Recuerda siempre que los bonsáis son seres vivos y que por tanto tienen unas necesidades que debemos satisfacer. No es por tanto un elemento decorativo más sobre el que priman criterios estéticos sino un ser vivo que tiene otras prioridades de naturaleza muy distinta, algo que debemos tener en cuenta y comprender si queremos que nuestro bonsái goce de buena salud